¿Cuál es el regalo perfecto para una chica? ¿Existe el regalo ideal para todas? Se hace tarde y no tengo en claro qué obsequiar, en qué puedo gastar mi, cada vez, escuchimizada quincena. Cada minuto dudo en el regalo perfecto. Qué dádiva voluntaria puedo ofrecerle a la señorita de ojos rumbosos. Me asomo a una posible solución: La Internet.

LEER COMPLETO >>

Digito www.google.com.pe y busco “Regalo perfecto”. El consumismo de Mercado Libre dice que los nacidos bajo el régimen de Virgo (22 de Agosto al 21 de Septiembre) son meticulosos en los detalles, eficientes, severos y racionales en su vida y trabajo. Buenos ahorradores. Como regalo perfecto tienen dos alternativas. Algo práctico: un iPod (claro, yo también quiero uno); como regalo valioso: Palms y Pocket. Conclusión: Imposible.

Hace unas semanas mi Jefa recomendaba obsequiarle a las chicas, bolsos, a ellas les encantan lucirlos, pero no cualquier bolso sino EL BOLSO. Me dicen que el regalo depende si la chica te gusta, si quieres algo con ella, pues si no deseas nada la bombardeas con peluches taiwaneses, pero si quieres algo más que un beso invadiéndote como enjuague bucal, el regalo sería una cena. Al diablo, sigo perdido, nada me convence. Me propuse buscar orientación humana-virtual a mi dilema: Inicio sesión del Messenger para preguntarle a mis contactos cuál es el regalo perfecto que le gustaría recibir a una chica, cuál sería ese gesto creativo que esperan recibir ellas.

N, amiga bloger o amiga de una amiga mía, ensaya la siguiente frase: “Wow… es difícil dar esa respuesta”. Luego en un tono más sincero y sobretodo ‘efectivo’, añade: “Si me preguntas, mi respuesta sería: dinero :( porque no me gusta que me den cosas que al final no me gustaran”. N tiene razón (yo quiero un sobre cerrado en mi onomástico de un cuarto de siglo), así evitamos estresarnos visitando tiendas, o lo solucionamos girando un cheque. Su respuesta es sabia y poco sibarita. Luego preguntó: “Pero, ¿No sabes que le gusta? Ya acabando N me recomendó uno de esos lugares muy Chic, “en la Pulga venden cosas bonitas y originales”.

Laura Zaferson, otra bloger (finalista en los 20 Blogs Peruanos), accedió muy amable a la encuesta al paso. “No podría opinar sobre la chica promedio. Te cuento lo que me gusta a mí. Aprecio mucho los regalos espontáneos. Prefiero un chocolate un día X que una flores en 14 de febrero”. Chicas como Laura ya se extinguieron en Lima (ella vive en Argentina), la mayoría de señoritas preferirían ir engrampadas del brazo de un hombre, consumir y/o embutirse todo lo que puedan un 14 de Febrero. Laura no se complica la vida, un detalle cualquiera es una muestra del aprecio y eso vale para ella: “Igual, yo creo que cualquier chica estaría feliz de recibir cualquier cosa que venga con cariño. Es importante el afecto a la hora de regalar. Los sentimientos se notan, creo yo. :)”.

Mi amigo y colega David, un tipo grueso, risible y sobretodo ocurrente, me aplicaba cachetadas de creatividad como hacerle “un diseño de un diploma a la mejor chica”, (agregó también: “webadas me haces decir”). Pero irónicamente David dice no creer en los regalos, pero si lo hace sería lo clásico y romántico que siempre dan: peluches, flores, etc. Muy humilde, él, añade que más regala “momentos”. No contento con su explosiva y colorida creatividad añadió lo siguiente: “Regálale un vale por un deseo que será canjeado en una semana y se lo cumples jijiji”. Después de todo no suena mal aquello último, ¿Y si me pide un viaje lunar? No, mala idea.

Ya casi se hace de noche y necesito otra opinión. Mi amiguísima Jet entra en sesión y la invado con la encuesta al paso. “Que, cómo es pues”, “¿Qué tipo de ropa usa?”, Jet quería detalles, saber “si es barrio o actual”, “fashion”, “emooooLIENTE"; desea saber “qué le gusta hacer”. Después de encaminarla con algunas pistas, cual computadora de ONPE arrojó las siguientes recomendaciones: “Entonces collares largos, cosas para las manos... tipo brazaletes”. Pero ¡Alto!!! Jet parece saber lo que realmente le gusta a una chica y me advierte de un detalle: “¡Ropa no!!!”. Yo todo inofensivo e ignorante de gustos femeninos respondí con un inocente “tons?”. Jet respondió: “Porque si es fashion tiene que ir contigo a escoger”.
- ¿Vestirse de peluche valdrá?
- Uhmmm

Hasta aquí ya tengo una idea amorfa del gusto femenino y de lo que puedo obsequiar, pero no daré señales del mismo aunque pienso en diminutos escarpines envueltos en craft. Puedo decir que aprendí a evitar resolver mis problemas de complacencia con la ayuda de la Internet, y de no hacer preguntas ridículas, resbalosas o patinadas olímpicas, es casi un exhibicionismo mediático. Realizaré un flashback mental y pensaré en los detalles que hicieron falta en ciertos momentos.

Al final del día analizo la posibilidad de agregar más personas a mi Messenger. Ingresa un ganador de los 20 Blogs Peruanos:
- Una pregunta... realizo una encuesta al paso. ¿Cuál seria el regalo creativo que le harías a una chica?
- Bah.


/////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////

001.- Improviso un regalo con el resbaloso y hartamente tierno Topo Gigio. Aunque su día fue ayer, yo le deseo un exquisito cumpleaños.


Maldito diario,
Tengo el corazón encogido y en gélido estado (como toda una gelatina marica) al verla ceñida a dos colores que la sujetan en el aire dentro de ese vestido que tapiza su cuerpo veinteañero. Dos colores le cruzaban el cuerpo y nunca pude abordarla. Maldito diario, ella es y no es un arcoiris bicolor.

LEER COMPLETO >>

[Quedamos en vernos en un cine conocido. Los minutos avanzan con suave letargo. Ahí está, ya la vi].

Se aparece ante mí como un arcoiris de solo rojo y negro. Única. Mis ojos escanean su silueta mientras que mi bombeador sangriento presiona REC al cerebro. Graba. Primer archivo a Data_01 y así al infinito. Ella va vestida como la sangre y el luto. El color que ciñe su piel va en diagonal: nace en el seno izquierdo y aterriza despacito en su muslo derecho. Esas líneas diminutas, delgadas, gruesas y complicadas la envuelven como los anillos a Saturno ¿Será que esa tarde ella me buscó para ser su satélite lunar?

[Hoy nos vemos las caras porque se le canceló un té de amigas. No almorzó. Compramos buffet. Estoy detrás de ella].

Dentro de esa tela, su tegumento casi chocolate, imitación de una caribeña perdida entre el solsticio y el equinoccio, es un catálogo abierto de tonos arcillosos. Al darse vuelta, dos lazos cansados se debaten en complicados nudos, cuelgan flojamente en su espaldar y danzan alabarés de derecha a izquierda.

[Ya no la puedo abordar con mis brazos de pulpo, solo nos queda abordar un rectangular bus heterogéneo. Vamos al CCE].

Su cabello sin dirección flota arriba de sus ojos rumbosos. Una tibia carnosidad habita en sus mejillas. Su pecho es el mismo lote baldío donde jugar de madrugada y por la mañana a levantarse, correr y escapar.

[Vimos media película de Buñuel. Alguien ronca. En una Heladería ella pide un helado sabor a jarabe].

Los ojos rumbosos, sus párpados de pequeña seductora, el celo de sus pestañas que me hacen guardia, cejas en bloque, todo está matizado por un tímido tono gris que desentona su forma de arcoiris bicolor.

[No pude embestir a esa ninfa bicolor mientras subía feliz por acceder al mezanine. Un golpe de caderas falso y un saludo al paso, “juiiiish", activó su risa balbuceante, la entrecortada y chillona como estación AM. Por un momento quería fingir, engañarme mientras iba a su lado, que ella no me veía, que yo no existía, que yo no era el que respiraba cada dos segundos del aire que ella acababa de exhalar, que yo no estaba ahí abrigándome los pellejos con el calor que evaporaba su propia piel, o descifrando los mensaje en clave después del tañer de sus tacos sobre el pavimento, o fingir una pequeña conversación:
- ¿Cuál es tu canción favorita?
- Yo no tengo canción favorita, solo te tengo a ti.
Fin de la tela bicolor, y sus medias pantis no son color caramelo. También llevaba botas, pero de eso no quiero hablar, eso no quiero ser].

/////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////

001.- Parte del soundtrack de esa tarde es esta canción de los Rolling.



Teleaparato que reproduce su señal de TV favorita © 2009

Peru Blogs